Las personas lesionadas por las explosiones de 1992 en Guadalajara, se manifestaron esta mañana frente al Palacio Municipal para exhigir una respuesta ante la cantidad de conflictos con el fideicomiso.
Desde la insuficiencia de medicamentos en la farmacia del Hospital General de Occidente, el déficit en la atención médica, el retiro de apoyos para ellos y sus familiares, hasta el cobro extra por servicios funerarios que ya se habían cubierto; para pacientes como la Sra. Lilia todo esto exhige una verdadera atención y solucionar el problema de raíz.
La inconformidad perdura desde el 2019, antes, no había queja alguna, por el contrario aplaudían la atención por parte del doctor que los atendía en ese entonces, quién los ayudaba con sus estudios y medicamentos.
La señora Lilia Ruiz Chávez, presidenta de la Asociación Civil 22 de abril en Guadalajara, comparte que desde el cambio de administración, el servicio y atención hacia con ellos ha disminuido, pues hoy en día incluso hablar con el encargado del fideicomiso es un problema ya que no es posible comunicarse con él y menos agendar alguna cita.
La principal molestia es que ya no hay los medicamentos que necesitan, y les piden que solucionen su falta de medicinas particularmente. Para ellos esto es inadmisible puesto que muchos tienen alguna discapacidad que les impide trasladarse en camiones y por la distancia en la que se encuentran deben solicitar algún taxi el cual les cobra desde 200 hasta 400 pesos solo para llegar a la clínica donde posiblemente no se encuentre el medicamento que necesitan.
Finalmente para los 58 fideicomisados, es fundamental conseguir el diálogo y así llegar a un acuerdo que les permita tener una buena calidad de vida como les había sido prometido.