
Diversas organizaciones revelan que reclutamiento forzado de menores por parte de cárteles delincuenciales o estar en medio de fuego cruzado ha sido la principal causa.
En lo que va de este sexenio, suman más de cinco mil menores, entre niñas, niños y adolescentes, los que han sido asesinados en México. Guanajuato, Estado de México, Michoacán, Chihuahua y Zacatecas, encabezan esta cifra de muertes violentas contra la población más vulnerable del país.
Especialistas de diversas organizaciones señalan que el reclutamiento forzado de menores por parte de la delincuencia organizada, así como encontrarse en los lugares donde hay ataques entre cárteles, o bien ser blanco de venganzas entre dichos grupos, son las principales causas de esta elevada cifra.
Datos como el que Guanajuato se encuentre al frente de esos asesinatos de menores, con 692, muestran cómo “los grupos criminales están tomando control territorial de estas regiones, con la complicidad de funcionarios locales y con la complicidad y negligencia de las autoridades federales”, señaló Juan Martín Pérez García, coordinador de Tejiendo Redes Infancia en América Latina y el Caribe.
De acuerdo a un conteo realizado por la organización Causa Común, del 1 de enero al 25 de abril de este 2023, se reportó el asesinato de 84 menores de edad a lo largo de la República, los casos más recientes, fueron en Guanajuato, donde un menor de 7 años murió cuando su familia fue atacada por un comando armado en el balneario La Palma, en Cortázar.
Un caso más tuvo lugar en aquella entidad la madrugada de hoy, en Apaseo el Grande, aunque aún se desconocen los motivos, fue también a manos de un comando armado que ingresó a una vivienda donde disparó contra cuatro mujeres, dos niñas entre ellas, quienes fallecieron en el lugar.
Cifras oficiales del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), de diciembre de 2018 a marzo de este año, reportan que 5 mil 093 menores de cero a 17 años fueron asesinados en México. De estos menores, 4 mil 648 fueron víctimas de homicidio doloso, mientras 445 niñas y adolescentes fueron víctimas de feminicidio.
