
En respuesta a las alegaciones formuladas por Marcelo Ebrard, el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha rechazado de manera enérgica cualquier insinuación de «mano negra» o «manipulación» en el proceso interno de Morena, destinado a favorecer a Claudia Sheinbaum en su posible candidatura presidencial. Sin embargo, el líder también emitió una clara advertencia de que su movimiento político no admitirá la presencia de «ambiciosos vulgares».
Durante una rueda de prensa matutina en el Palacio Nacional, el Jefe del Ejecutivo Federal sugirió que las expresiones de preocupación planteadas por Ebrard son reflejo de «inquietud, dudas y nerviosismo».
«Entonces, es muy distinto en nuestro movimiento, aquí, en nuestro movimiento ya estamos hablando de este asunto, estamos hablando de quién va a coordinar el movimiento de transformación, aquí no hay interés personal o de grupo que esté por encima del interés general, del interés del pueblo, no hay cabida para ambiciosos vulgares, aquí se lucha por ideales, por principios», señaló López Obrador.
Cuando se le cuestionó si descartaba cualquier influencia oculta, el Presidente respondió de manera contundente: «Totalmente. No veo en ningún caso que haya manipulación, lo que existe pues es inquietud, son dudas, nerviosismo, todo lo que es propio de las vísperas de una decisión tan importante que va a tomar la gente, no el Presidente».
¡En la #CuartaTransformación no hay espacio para ambiciosos vulgares!
El Presidente @lopezobrador_ recordó que lo que está en juego es el Proyecto de Nación, no un interés personal o de grupo. pic.twitter.com/Lg9aH135MG
— El Soberano (@ElSoberanoMX) August 18, 2023
