
Basura Espacial de SpaceX en México, hasta 10 toneladas de fragmentos, algunos con advertencias de materiales peligrosos, ha dejado la empresa de Elon Musk en Playa Bagdad, Matamoros, Tamaulipas.
Desechos provenientes de pruebas de cohetes Starship de SpaceX, empresa liderada por Elon Musk, han generado preocupación en México tras llegar a Playa Bagdad, Matamoros. Organizaciones como Conibio Global reportan hasta 10 toneladas de fragmentos, algunos con advertencias de materiales peligrosos, afectando el hábitat de especies protegidas como tortugas marinas y delfines.
El incidente, derivado de explosiones en la base de Boca Chica, Texas, cerca de la frontera, ha llevado a ambientalistas a exigir que SpaceX, bajo la dirección de Elon Musk, limpie los restos y repare los daños.
La presidenta Claudia Sheinbaum ha solicitado un informe oficial sobre el impacto ambiental. Aunque SpaceX afirma que los materiales no son tóxicos, no se han reportado acciones coordinadas con el gobierno mexicano.
Los desechos provienen de las pruebas y explosiones de cohetes Starship realizadas en la base de Boca Chica, Texas, ubicada a pocos kilómetros de la frontera mexicana. Durante estas pruebas, algunas fallidas, como las reportadas en 2024 y 2025, fragmentos de los cohetes se dispersan por la fuerza de las explosiones y las corrientes marinas del Golfo de México los trasladan hasta las costas mexicanas.
La base de Boca Chica está a menos de 10 km de la frontera, facilitando que los restos lleguen a México por viento o corrientes marinas.
SpaceX realiza pruebas regulares de sus cohetes, y las explosiones controladas o accidentales generan fragmentos que no siempre se recuperan completamente.
