
El secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), António Guterres, lamentó muerte de 39 migrantes; otros organismos piden se revisen condiciones de atención y trato más humanitario.
En breve comunicado, el secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, manifestó estar “profundamente entristecido” por la muerte de 39 migrantes en un incendio ocurrido en la agencia migratoria de Ciudad Juárez, Chihuahua, del Instituto Nacional de Migración (INM).
El funcionario de la ONU pidió una exhaustiva investigación sobre los hechos, al tiempo que ofreció sus condolencias a las familias de los fallecidos y lesionados en el siniestro.
Guterres realizó un urgente llamado a los países donde se producen grandes afluencias de movimientos migratorios para “establecer rutas más seguras, reguladas y organizadas”, además de que reiteró el compromiso de la ONU para trabajar junto con ellos.
Por su parte, la Compañía de Jesús en México, al igual que otros organismos de derechos humanos, pidió que se garantice un trato humanitario para los migrantes afectados por este incendio, “garantizando sus derechos humanos y atención consultar en todo momento”.
Los jesuitas pidieron también que se investiguen las condiciones en las que se encontraban las personas migrantes cuando ocurrió el siniestro, ya que pudieron ser condicionantes de propagación del incendio con el trágico saldo de 39 migrantes muertos y 29 lesionados.
