
Una de las grandes incógnitas es si el ex canciller se mantendrá fiel a Morena si el proceso interno no lo favorece
Se acaba el tiempo y muy pronto el partido Movimiento de Regeneración Nacional tendrá que definir quién será su candidato o candidata a la presidencia de la República en 2024.
Y aunque quieren vender una imagen de unidad ante esta última etapa del proceso, ya se empiezan a ver algunos inconformes, el más claro, el ex canciller Marcelo Ebrard quien pareciera haber olvidado que hace apenas cinco meses reconoció en entrevista con el medio estadounidense Bloomberg que el candidato de Morena lo definirá el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
Lo que está ocurriendo con Ebrard Casaubón genera diversas incógnitas, la principal, es si permanecerá en Morena si el proceso interno no lo favorece, si le levantará la mano a Claudia Sheinbaum o si es mayor su ambición por la silla presidencial que buscará la candidatura con otras opciones.
Si pese a Morena Ebrard insiste en ser el candidato, y aunque se percibe difícil, pudiera acercarse al partido Movimiento Ciudadano, con quienes siempre han dicho que tiene buena relación, pero habría que esperar a ver si los demás aspirantes quedarían tan contentos.
¿Sería posible que entonces Marcelo Ebrard buscara encabezar la Alianza Va por México?, entonces dónde quedaría el proceso interno y el resto de los aspirantes que llevan trabajando por lograr ser la o el candidato.
En fin, nada está escrito, y quienes buscan ser candidatos tendrán que tomar decisiones complicadas, si optan por ser fieles a sus partidos, si ganarán sus ambiciones, o si acaso realmente su interés es México.
¿Cómo votarían los mexicanos si en la boleta del 2024 rumbo a la presidencia estuvieran Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard?
