Sheinbaum rechaza negociar adeudo fiscal de Grupo Salinas, la mandataria aseguró que la ley no se negocia y menos en lo oscurito. Grupo Salinas acumula nueve casos fiscales en litigio ante la SCJN por un monto total de 48 mil 382 millones de pesos.
La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo descartó cualquier posibilidad de negociar en privado los adeudos fiscales multimillonarios del Grupo Salinas, propiedad del empresario Ricardo Salinas Pliego, y enfatizó que su gobierno actuará con estricta transparencia y apego a la ley.
«La ley no se negocia, menos en lo oscurito», afirmó durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, citando al expresidente Benito Juárez: «Nada ni nadie por encima de la ley».
Las declaraciones de Sheinbaum responden directamente a la propuesta hecha ayer por Salinas Pliego en la red social X, donde solicitó instalar una «mesa de diálogo responsable, abierta, seria y transparente» entre sus representantes y el gobierno federal para resolver los impuestos pendientes de sus empresas, que acumulan más de una década de litigios.
El empresario argumentó que el objetivo sería «pagar lo que es justo y corresponde, ni más ni menos, de acuerdo con la ley», y subrayó que no se trata de un pleito personal, sino de generar confianza en reglas claras para la inversión y el empleo en México.
Durante la exposición, la Procuradora Fiscal de la Federación, Grisel Galeano, detalló que Grupo Salinas acumula nueve casos fiscales en litigio ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), por un monto total de 48 mil 382 millones de pesos.
Estos adeudos provienen de auditorías realizadas entre 2008 y 2018, que originalmente sumaban 38 mil millones de pesos, pero que han crecido por ajustes inflacionarios y recargos.
Galeano acusó al grupo de abusar del esquema de consolidación fiscal –eliminado en 2013– mediante fusiones y divisiones artificiales para generar pérdidas indebidas y reducir su carga tributaria.
Según datos del gobierno federal actualizados a junio de 2025, el conglomerado enfrenta 32 asuntos fiscales en total, por hasta 74 mil millones de pesos en impuestos, multas y recargos.
Sheinbaum aclaró que su administración está abierta al diálogo, pero no a acuerdos fuera del marco legal. «Siempre vamos a estar abiertos al diálogo, nosotros nunca vamos a cerrar la puerta a nadie, pero negociación de la ley, nunca», reiteró.
Explicó que el Grupo Salinas tiene los mismos derechos que cualquier deudor: impugnar dentro de la ley, y acceder a descuentos en multas y recargos si paga conforme al Código Fiscal.
«Esos tiempos ya quedaron en el pasado», agregó, aludiendo a prácticas del «viejo régimen» donde se buscaba minimizar impuestos al margen de la norma.
El enfrentamiento entre Sheinbaum y Salinas Pliego se ha intensificado en las últimas semanas. El 24 de septiembre, la presidenta cuestionó públicamente al empresario por una fianza de 25 millones de dólares pagada a AT&T en Estados Unidos para evitar una orden de arresto por un diferendo millonario, al que calificó de «defraudación fiscal».
Además, Sheinbaum ha pedido investigar cómo Salinas adquirió TV Azteca, se benefició del Fobaproa y obtuvo acciones de Mexicana de Aviación.
En respuesta, Grupo Salinas ha calificado estas acusaciones de «acoso sistemático y persecución política», y evalúa demandar a la mandataria por «difamación y daño moral» en tribunales de México y Estados Unidos.
A junio de 2025, la cartera de créditos fiscales del SAT superaba los 3 billones de pesos, y el gobierno ha instado al Poder Judicial a resolver pendientes similares con otras empresas.
Sheinbaum insistió en que el cumplimiento fiscal es esencial para el Estado de derecho, beneficiando a todos los contribuyentes.