Enfrentamiento en el Senado entre «Alito» y Noroña
Enfrentamiento en el Senado entre Alito y Noroña, prepotencia, arrogancia y agresividad de Alejandro Moreno vs. Calma, impasibilidad y serenidad sorprendente de Gerardo Fernández Noroña, se vio en la tribuna del Senado de la República.
La más alta tribuna del país parecía más un ring de lucha libre, con un encolerizado Alejandro “Alito” Moreno, senador del PRI, que exigía con una muestra de arrogancia, prepotencia y agresividad que el presidente de la Mesa Directiva, Gerardo Fernández Noroña, abriera el debate para discutir la declaratoria de “Supremacía Constitucional”.
Para sorpresa de propios y extraños, la serenidad marco el comportamiento en respuesta del legislador por Morena, Gerardo Fernández Noroña, quien exigía respeto a la investidura de presidente del Senado de la República.
El conflicto comenzó cuando Fernández Noroña, decidió avanzar en la agenda legislativa sin ceder la palabra a los senadores del PRI, lo que enfureció a Alejandro Moreno, quien reclamaba el derecho de su bancada a participar en el debate.
El también Presidente del partido tricolor enfurecido subió hasta el lugar del presidente y le reclamó con gritos “Siempre te he respetado para que no me des la palabra”, expresó Moreno frente a Fernández Noroña que, en ese momento, permanecía ecuánime sentado en su lugar.
Moreno seguía molesto y gritando por lo que Noroña le pidió que regresara a su curul para hablar desde allí, “Vaya a su curul…, dígame desde su curul”, respondió Noroña, provocando aún más la molestia del priista.
Fue entonces cuando los gestos corporales entre ambos legisladores se intensificaron, y un roce físico menor elevó la tensión.
Fernández Noroña reaccionó de inmediato al contacto: “¡No me ponga el dedo encima!”, exclamó, visiblemente alterado.
Moreno, por su parte, respondió con igual intensidad: “¡A mí no me grites! ¡No me grites!
El intercambio de acusaciones continuó mientras otros senadores intentaban calmar la situación, hasta que la senadora de Morena, Lucía Trasviña, se interpuso físicamente entre los dos legisladores para evitar que el conflicto se agravará.
Noroña insistía en que se respetara su autoridad como presidente de la Mesa Directiva: “¡Respeto a la presidencia!”, repetía, mientras que Moreno, sin ceder terreno, respondía: “¡Date a respetar!”.
Tras varios minutos de tensión, y con la intervención de otros senadores, Fernández Noroña optó por concluir la discusión y reanudar la sesión.
“Continúe la Secretaría con los asuntos de la agenda”, señaló, lo que obligó a Moreno a dar media vuelta y regresar a su lugar.