Existe vacío temporal en la garantía de derechos de transparencia y protección de datos

Existe vacío temporal en la garantía de derechos de transparencia y protección de datos, Morena a pesar de autoreconocerse como un “partido transparente” pero en la practica se ha encargado de eliminar a los organismos o instituciones que brindaban el acceso a la información a los ciudadanos.
Los plazos de acceso a la información en México están suspendidos debido a la extinción del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales, lo cual se dió el 21 de marzo de 2025, como parte de una reforma aprobada por el Congreso.
Esta disolución ha llevado a la transferencia de funciones, expedientes y recursos a un nuevo organismo llamado Transparencia para el Pueblo, bajo la Secretaría de Anticorrupción y Buen Gobierno, lo que ha generado un proceso de reorganización administrativa.
Durante este período de transición, se han suspendido ciertos plazos, especialmente los relacionados con recursos de revisión, inconformidades y denuncias por incumplimiento que antes resolvía el INAI.
Para el Poder Ejecutivo, la suspensión se extiende hasta el 3 de junio de 2025, mientras que para los poderes Legislativo, Judicial y órganos autónomos, es hasta el 19 de junio de 2025. Ésto podría generar un vacío temporal en la garantía de derechos de transparencia y protección de datos, además de posibles conflictos de interés en los nuevos órganos encargados, como las contralorías internas, que no fueron diseñadas originalmente para estas funciones.
El Gobierno de la 4T se ha mostrado incongruente con los principios de transparencia que Morena ha defendido en su discurso.
La transparencia pierde la autonomía con la que contaba el INAI que era un organismo autónomo, diseñado para fiscalizar al gobierno sin interferencias políticas. Al trasladar sus funciones a una secretaría dependiente del Ejecutivo, se percibe un riesgo de control gubernamental sobre la información, lo que podría limitar el acceso a datos sensibles o incómodos para el poder en turno.
Además de que se enfrentará a una crisis de capacidad institucional pues las contralorías internas, que ahora asumirán roles antes exclusivos del INAI, no tienen la misma especialización ni independencia. Esto podría derivar en resoluciones menos imparciales o en retrasos, como ya se observa en la suspensión de plazos hasta junio de 2025.
Morena históricamente abogó por combatir la opacidad y la corrupción. Eliminar un organismo que, aunque imperfecto, era un pilar del sistema de rendición de cuentas, puede interpretarse como un paso atrás frente a esos ideales, sobre todo cuando no hay claridad sobre cómo el nuevo organismo garantizará los mismos estándares de acceso a la información y protección de datos.