Justicia para Agustín, comunidad de Mazamitla marcha por la muerte de un niño de 2 años en guardería tras quedar atrapado en la resbaladilla con sus cordones de su chamarra.
Decenas de personas se manifestaron este viernes frente al Centro Educativo Mazamitla, exigiendo justicia por la muerte de Agustín Cota Fuentes, un niño de 2 años y 10 meses que falleció el 28 de septiembre tras un trágico accidente en la resbaladilla de la guardería.
La marcha, convocada bajo el lema «Justicia para Agustín», partió del Oxxo en el centro del municipio y culminó en las instalaciones del kínder, donde los participantes colocaron veladoras y carteles denunciando negligencia en la supervisión de los menores.
La muerte de Agustín ha movilizado a la comunidad de Mazamitla, padres de otros alumnos expresaron preocupación por la seguridad en el CEM, destacando que el ciclo escolar ya inició y no hay alternativas inmediatas para reubicar a los niños.
«Es una tragedia que no debió pasar; ¿quién supervisa estos juegos?», cuestionó una madre durante la manifestación de este viernes que reunió a familiares, vecinos y activistas, quienes portaron fotos del pequeño y exigieron una investigación exhaustiva para evitar que el caso quede impune.
La familia de Agustín, que cumpliría 3 años en noviembre, urge a las autoridades a actuar con celeridad. «Queremos que su muerte sirva para que otros niños no sufran lo mismo», concluyó Karla Fuentes.
La familia acusa al CEM de negligencia, señalando falta de supervisión adecuada, ausencia de protocolos de emergencia y capacitación insuficiente del personal.
«Me lo entregaron muerto», denunció Fuentes en entrevistas, exigiendo que se investigue por qué el juego no fue revisado y por qué el uniforme con cordones no representa un riesgo para niños tan pequeños.
El incidente ocurrió el 25 de septiembre durante el horario escolar. Según el relato de la madre del menor, Karla Fuentes, Agustín se deslizó por la resbaladilla vistiendo el uniforme del CEM, que incluye una chamarra con cordones en el cuello.
Uno de estos cordones se enredó en la estructura metálica del juego, dejando al niño suspendido por el cuello durante más de dos minutos. Fuentes relató que su hijo pataleó y manoteó visiblemente hasta perder el conocimiento, pero el personal no se percató de inmediato.
Una niña alertó a la maestra, quien lo bajó y corrió a la oficina en busca de ayuda, sin aplicar primeros auxilios de inmediato.
La directora del centro, según la madre, minimizó el incidente al principio, cuestionando por qué se había alarmado la educadora.
Tras el accidente, Agustín fue trasladado al hospital de Mazamitla, donde paramédicos lo reanimaron temporalmente. Posteriormente, una ambulancia del SAMU lo llevó al Hospital Country en Guadalajara, donde permaneció intubado en estado crítico por asfixia prolongada y daño neurológico. Lamentablemente, el pequeño no resistió y falleció tres días después.
La Secretaría de Educación de Jalisco y la Fiscalía del Estado han calificado el suceso como un «accidente fortuito». El secretario Juan Carlos Flores Miramontes confirmó que el CEM cuenta con todos los permisos vigentes, incluyendo verificación de infraestructura y personal suficiente.
«Fue una coincidencia lamentable entre el cordón de la chamarra y el tipo de resbaladilla, que había sido utilizada por cientos de niños sin problemas previos», explicó Flores.
Las inspecciones iniciales no detectaron irregularidades en el kínder, que opera con normalidad pese a que algunos padres han retirado a sus hijos por temor.
Por su parte, la Unidad Estatal de Protección Civil y Bomberos solicitó al Ayuntamiento de Mazamitla verificar el cumplimiento de lineamientos de seguridad en escuelas privadas, una revisión anual obligatoria.
El CEM emitió un comunicado asumiendo los gastos funerarios y comprometiéndose a cooperar con las autoridades, pero rechazó las acusaciones de negligencia.
Hasta el momento, no hay imputados ni avances en la carpeta de investigación de la Fiscalía.
Este caso resalta la importancia de protocolos estrictos en centros educativos, especialmente en áreas de juego. La SEJ ha prometido una revisión general de guarderías en el estado, pero la comunidad espera resultados concretos más allá de las declaraciones oficiales.