El mismo presidente que juró nunca militarizar al país, ahora abre la puerta a los militares de Estados Unidos
De acuerdo con información del Senado de la República, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador solicitó el aval de este poder para permitir que militares estadounidenses ingresen al país para entrenar a las fuerzas especiales mexicanas y esto podría ocurrir a principios de 2024.
En caso de que se concretara esta propuesta, de nueva cuenta, pero más peligroso, el mandatario mexicano caería en una de sus mayores contradicciones, cuando al inicio de su sexenio se comprometió a no militarizar el país.
López Obrador ha sido muy criticado por el enorme poder que ha brindado a las Fuerzas Armadas, encargadas ahora incluso de la construcción y manejo de los grandes proyectos mexicanos, pero ahora da un paso más, pudiera abrir la puerta a la milicia del vecino país del norte.
El anuncio publicado el martes decía que el presidente Andrés Manuel López Obrador solicitó permiso para que 11 militares estadounidenses participen en un programa llamado «Fortalecimiento de las Capacidades de las Fuerzas Especiales del Ministerio de Defensa».
Curiosamente, López Obrador ha defendido vigorosamente el principio de soberanía mexicana, aprobando medidas para restringir la capacidad de los agentes antinarcóticos estadounidenses de operar en México.
El programa de entrenamiento se llevará a cabo en un centro de entrenamiento militar al sureste de Ciudad de México entre el 23 de enero y el 21 de marzo de 2024, según la notificación del Senado, que también incluía una copia de la carta enviada por el presidente izquierdista.
Se espera que las tropas estadounidenses lleguen a México con sus propias armas, municiones y equipo, agrega la carta del Senado.
Durante su estadía, los soldados estadounidenses serán asignados a la Secretaría de Defensa de México (SEDENA), que históricamente ha tenido estrechos vínculos con el ejército estadounidense.