Autopista Guadalajara -Vallarta un fiasco aseguran los usuarios

Autopista Guadalajara -Vallarta un fiasco aseguran los usuarios, la vía corta que conectaría a la capital de Jalisco con Puerto Vallarta en tan solo 2 horas y media no resultó como se esperaba por más de 13 años. Es cara y muy tardada por lo que los “beneficios” aún no se ven.
En el cierre del período vacacional invernal fue un verdadero caos para los automovilistas que buscaban regresar a sus lugares de origen usando la Autopista donde sobretodo en la caseta de Plan de Barrancas se reportó más de cuatro kilómetros de fila de vehículos que buscaban pagar el peaje.
La autopista Jala–Puerto Vallarta cuenta con 173 kilómetros y una inversión de 2,024 millones de pesos. Pasaron más de 13 años luego de que en el 2011, aún con el presidente Felipe Calderón, se inició la construcción con la intención de conectar a Guadalajara y Puerto Vallarta de forma más eficiente con seguridad y llegando a su destino con 2 horas menos de traslado.
Pero aún así, casi todo el sexenio de Enrique Peña Nieto se la pasó Gobierno Federal peleando derechos de vía y permisos con ejidatarios y fue hasta el 2017, un año antes de concluir su mandato que se inauguró el primero de tres tramos.
Posterior a ello, el 28 de diciembre del 2024, casi 13 años desde los primeros trabajos, la presidenta de México Claudia Sheinbaum Pardo por fin inauguró el tercer y último tramo de la vía corta a Vallarta.
Sin embargo, las promesas para los viajantes no se han podido cumplir e incluso se ven bastante afectados en sus bolsillos pues la Autopista Vallarta-Guadalajara se ha convertido en una de las más caras del país, tanto que hasta incluso se ha cuestionado si conviene más el viaje en avión.
El peaje para autos por las seis casetas del tramo completo es de $1,300, lo que arroja un precio promedio de 7.5 pesos por kilómetro recorrido, muy por encima de otras autopistas del país, pues en un ejercicio de comparación la Autopista del Sol México-Acapulco cuesta 2.4 pesos por kilómetro recorrido.
Una vez concluido el periodo vacacional, al menos laboral pues el regreso a clases será hasta el jueves, los automovilistas regresaron aún más estresados por el tiempo perdido en kilométricas filas en las casetas y con la cartera vacía, pero eso sí “bien paseados” como dice la chaviza.